Se enfrenta a una pena de al menos 15 años de prisión por “seguridad”, teniendo el agravante poca importancia a bordo del barco.
El viceprimer ministro italiano, Matteo Salvini, mantuvo esta línea dura contra la inmigración irregular y confirmó ante el tribunal que estaba prestando un «servicio útil» para impedir que un grupo de casi 150 inmigrantes aterrizando en Italia en…